A horas de su charla de jabalina con la Federación Atlética Rio Negro, hablamos con el entrenador Gustavo Osorio. El profesor adelantó algunos de los conceptos que brindará para ayudar en la formación de nuevos colegas y atletas. La cita virtual es este martes 30 por la tarde. En Bien de Allen pudimos conversar antes y rescatamos algunas de sus palabras en esta nota. ¡No dejes de escuchar toda la entrevista!
Esta semana es el último encuentro del seminario propuesto por la federación rionegrina de atletismo. El capitulo final se lo guardaron a Gustavo Osorio. Además de ser Licenciado en Educación Física, se especializó en la preparación de lanzadores de jabalina. Entre sus atletas destacados, es imposible no recordar a Braian Toledo. Fue un emblema de la disciplina y sorprendió a todos desde temprana edad.
En los primeros años de Toledo estuvo presente Osorio. El profesor supo contenerlo y guiarlo para que aprendiera a amar la jabalina. Quizás el desafío más importante como entrenador es contagiar esa pasión por el deporte. «Un formador primero tiene que tener vocación, compromiso, ocuparse y preocuparse por estudiar, experimentar, sobre todo siempre estar abiertos a la crítica constructiva. El ambiente deportivo retroalimenta y ayuda, o sea, que es sinónimo de crecimiento, motivación y prosperidad», explicó Osorio.
«El atletismo de pista y campo está caído porque no se generan espacios. Lo ven aburrido, es más divertido hacer running porque hay otras motivaciones externas y competencias. Pero en el campo es donde se han dado más resultados, en ámbitos mundiales y olímpicos. Es donde hay mucho nivel técnico», sostuvo. «Esta actividad que organizan en el valle permite despertar inquietudes y encontrar personas que quieran desarrollar las pruebas de campo. Tenemos que jerarquizar a los profesores», agregó.
En diálogo con Bien de Allen, Osorio enfatizó que una buena infraestructura es importante pero no es determinante para la disciplina. Nuevamente, valoró el conocimiento y la voluntad de atletas y entrenadores. «Lo más importante es la actitud, hay gente con condiciones y no las utilizan. Hay que aprender a enseñar, con actitud profesional. Nosotros tenemos que generar espacios, herramientas innovadoras. Si no le mostramos, no sabe que existe. Y capaz que le cambia la vida…Un alumno puede cambiar si estamos presentes. Los brillantes tenemos que ser nosotros, más allá de que tengamos una pista sintética o no», argumentó.
En cuanto a la relación entre el lanzador y el entrenador, Osorio consideró que lo principal es la credibilidad. «Si ellos no creen en vos, es imposible conseguir objetivos. Y eso va de la mano del conocimiento. Preparar todo, anticiparse al atleta, mantener la conducción en el trabajo de equipo, con planificación para que el atleta pueda visualizar la semana», explicó. «Queremos que cuando compita, haga su mejor marca personal», remarcó. Osorio expresó que se debe enseñar cómo entrenar y cómo competir, explotando al máximo las cualidades del atleta. «Fortalecer su parte mental para ayudar a que pueda cumplir con el día a día. Cualquier persona puede lanzar, es importante la formación base y ayudar a los jóvenes, guiándolos de la mejor manera», sentenció.
No te pierdas la entrevista completa. Nos contó cómo ve a las disciplinas olímpicas de cara a Tokio, cómo resolvió el entrenamiento en cuarentena y la proyección que visualiza para su hijo Agustín, también lanzador de jabalina. Accedé desde este link o hacé click en el reproductor de abajo. Está en nuestras redes sociales, compartila..!
